El abuelo de mi padre llegó al valle muchos años antes
de que emigraran de nuestras arboledas soledosas las criaturas del espanto y
quince años después que, las montoneras de Andamarca, Comas, Quichuay, Apata y
Concepción arrasaran a un contingente de soldados chilenos en cruento combate,
durante la incursión enemiga en la sierra central. Vino para compartir
testimonio de un siglo que iba agonizando y de otro que nacía trayendo grandes
cambios, incluyendo los nombres antiguos de estas tierras. Fue un viaje
empecinado y a contravención con los llamamientos de la sangre y la tierra de
sus ancestros. Sólo los apresuramientos de un corazón herido por el desprecio
de un padre acomodado que le negó su nombre y su cariño fueron capaces de arrancarlo
para siempre de su lejana Cajabamba para traerlo al abrazo de nuestro límpido
cielo y al goce de la dicha refrescante de nuestras aguas.
Lo
extraordinario del bisabuelo es que llegó apenas con su enorme cargamento de
amor y sin dinero para iniciar los trámites de su propio destino. A fuerza de
fe fundó una nueva familia y a fuerza de brazos comenzó a pircar los cimientos
de su vida en el valle. Trabajó a diario desde el primer anunció del alba hasta
la muerte del último rayo del sol y la tierra le fue fructífera; las lluvias,
benignas; las cosechas, abundantes; y la fortuna, prometedora.
Los
bisabuelos, a inicios del siglo, se dieron tiempo para explorar todas las
vertientes de su amor sin reticencias ni falsos temores; fueron felices pero no
les cayó a bien el arte de engendrar hijos. En una época en que las buenas
familias campesinas sobrepasaban la decena de descendientes, mis bisabuelos
apenas tuvieron dos: el abuelo Ramón, y la tía abuela Victoria.
Al
bisabuelo le faltó tiempo para ver a sus hijos realizados: le vino la muerte
por correr en los campos, recién comido, tras un toro descontrolado, justo el
año en que llegó el tren para cambiarnos la vida, los hábitos y las historias
que para entonces eran reales y ahora sólo delirio de viejos.
- ¿Por qué crees que el autor ha escogido el título "En el valle" para hablar de su bisabuelo? ¿A qué se refiere cuando menciona a las criaturas del espanto y a las historias reales que ahora son delirios de viejos?
HOSTIA
Te amo bañado de retamas
Flor de verano
Luz de ardor
Y lleno del amasijo húmedo
Moreno
Fulgurante pan de tus ojos
Voraz de ti
De tu piel de espiga madura
Soy la tierra que se levanta
Besándote
Vahada implorándote
Y buscando las alegrías
Del trino
La hierba y los guindales
En la lluvia que de tu risa
Desborda claridad entera.
Estro del fuego
Soy un árbol de arcilla
Esperando tus manos
Y de mis gemas anhelantes
Sólo rescatarás la vida
Si mi corazón tomas de hostia
O hallo tu amor mi savia miel.
- ¿A quién se dirige el poeta? ¿Qué simboliza el rescate de la vida, la hostia y la savia en este poema?